lunes, 28 de mayo de 2012

Resistencia Libertaria, el anarquismo organizado en los 70 en Argentina (1970-1978)


Primer texto extraído de una disertación de Fernando López Trujillo, durante una charla en Paraná el 22 de marzo de 2004. Publicado en “Documentos para el debate Nº3: El anarquismo en la historia de las luchas sociales argentinas”, Organización Socialista Libertaria; El segundo y tercero son fragmentos de una entrevista realizada por Chuck Morse a Fernando López Trujillo, el 13 de octubre de 2002. Traducida del inglés al español por Frank Mintz.

“Resistencia Libertaria (RL) era activa en los movimientos estudiantil, laboral y barrial y también tenía un ala militar con la que defendió y financió sus actividades. En su mejor momento, tenía entre 100 y 130 miembros y una red mucho mayor de simpatizantes. La organización fue diezmada en 1978 y el 80 % de sus miembros pereció en los campos de concentración y las cámaras de tortura de la dictadura.”[1]

El anarquismo frente al Peronismo y la aparición de una “Nueva Izquierda“
El peronismo por primera vez le planteaba a la izquierda el desarrollo de un movimiento popular, es decir, un movimiento ampliamente popular, pero al mismo tiempo con un carácter burgués, con una cantidad de elementos que eran tradicionalmente de la derecha. Toda la izquierda en la Argentina sufrió frente al peronismo una fuerte decadencia, que no está motivada por la represión. Yo, francamente, no creo que haya habido una gran represión del peronismo hacia la izquierda; lo que si creo, es que la izquierda se encontró frente a un movimiento que expropió muchas de las que eran sus banderas tradicionales, expropiadas y colocadas dentro de un discurso que no era tradicionalmente de izquierda. Quien más sufre este tipo de canje, de cambios, de movilización de elementos del discurso, es el anarquismo. Figuras tradicionales del anarquismo, como el "descamisado" por ejemplo, son apropiadas por el peronismo, que las va a colocar en el centro de su folklore. Los anarquistas eran "los negros", "los descamisados", y de pronto existía un movimiento de carácter popular, también como había sido el anarquismo, pero con un militar a la cabeza, y una cantidad de sectores burgueses y de derecha en sus filas, que incorporaban todo lo que eran estas imágenes tradicionales de los ácratas.
Toda la izquierda frente al peronismo se encapsuló. Para el anarquismo ese encapsulamiento, ese encierro, resultó funesto. En el año 1955 el anarquismo amanece destruido. Es un movimiento sectario, encerrado, aislado, y en ese marco va a comenzar a surgir en Argentina, y en América Latina, la "nueva izquierda".
La "nueva izquierda" va a hacer un fuerte cuestionamiento a lo que son las concepciones tradicionales de la izquierda, y el anarquismo no está alejado de esa discusión. A fines de los años '60 va a empozar a desarrollarse, en La Plata, un agrupamiento que va a ser el inicio de la RL (Resistencia Libertaria). Esto no está desconectado del surgimiento do la "nueva izquierda", porque grupos como la RL están surgiendo a lo largo de todo el País. Por lo que he relevado hasta ahora, grupos del mismo carácter surgen en Córdoba y en Buenos Aires Podemos mencionar, por ejemplo, los GAR (Grupos Anarquistas Revolucionarios), la LAC (Línea Anarco Comunista), la Acción Directa, que era un periódico de carácter nacional que se distribuía en todo el país. A diferencia del anarquismo tradicional, de origen obrero, este nuevo anarquismo surge de sectores pequeño burgueses, manifestándose de forma urgente, sobre todo tras el Cordobazo, la necesidad de insertarse en las masas. Una de las discusiones prioritarias, una de las discusiones paradigmáticas de los años 70, es el tema de la proletarización. Esto incluyó a todo el movimiento de la izquierda y de la "nueva izquierda". En cuanto al anarquismo significó que todos estos agrupamientos que tenían origen pequeño burgués, se incluyan en el ámbito fabril. Insertarse en el ámbito fabril no significaba simplemente conseguir un trabajo en una fábrica. Se hablaba de proletarización desde el punto de vista cultural y social, es decir, desde una inserción en la convivencia. Se buscaba un cambio de sociedad, un cambio de mundo y de concepción de mundo.
En el caso de La Plata, la RL comenzó a tener inserción en los astilleros, por supuesto en el movimiento docente, y en el movimiento comercial, donde tradicionalmente lo tenía por su origen pequeño burgués. En Buenos Aires va a tener inserción en Alpargatas, en el gremio de plomeros, donde ya existía, donde se había conservado tradicionalmente, pero ahora también se amplia a una inserción en el gremio textil, el gremio de la pintura. En Córdoba estos pequeños núcleos logran inserción en lo que es el SMATA (mecánicos), el caucho y en proyectos barriales. En Córdoba, precisamente, se va a desarrollar un congreso clandestino en el cual participan agrupaciones de Buenos Aires, de La Plata, de Córdoba, una agrupación de Rosario, la Federación Anarquista Uruguaya (FAU) y su aparato militar, la OPR ( Organización Popular y Revolucionaria). También concurren a ese congreso lo que fue la Comunidad del Sur, compañeros de una agrupación mendocina. En este congreso se va a intentar la construcción de una organización específica a nivel nacional, pero no se llegó más allá de un acuerdo sobre un par de documentos, algún tipo do coordinación. Sin embargo, lo cierto es que algunas de las organizaciones concurrentes si fijan una coordinación, y así surge la Resistencia Libertaria a nivel nacional.
De esta coordinación participan el grupo El Libertario, de Córdoba, lo que es la vieja RL, de La Plata, y Acción Directa, de Buenos Aires.
Estos grupos se funden en agrupamientos dentro de lo que es RL, y surge Resistencia Anticapitalista Libertaria (RAL).
1974 y 1975 son años de represión. Durante el '75 comienzan las primeras desapariciones. Nos desaparecen compañeros en Córdoba, nos desaparecen compañeros en La Plata. Nosotros teníamos por norma de seguridad descolgar a los compañeros que estaban haciendo la conscripción (en esa época todavía existía la conscripción obligatoria que se levantó en el 90 bajo Gobierno menemista), así y todo, un compañero que hace la conscripción en la Plata es desaparecido, torturado durante 15 o 20 días, y finalmente aparece y nosotros lo sacamos de Buenos Aires.
Con esto quiero significar que, si bien a veces se tiende a pensar que la represión aparece con la dictadura, la desaparición de militantes comienza en realidad en el año '74, y va a estar impulsada por sectores de la derecha del Gobierno, y por el radicalismo. Aquellos radicales que durante años se llenaron la boca hablando de la democracia, y de lo democráticos que son y demás, tienden a olvidar que quien hace la campaña en contra de la llamada "guerrilla industrial", por la cual comienzan a desaparecer delegados de fábrica de todo el país y militantes gremiales clasistas, es Balbin, el "democrático" diputado Balbín.
La RL se definía como una organización clasista que promovía la constitución de un poder obrero. Es decir, su estrategia general apuntaba a la construcción de un poder desde la clase obrera misma, una organización de clase que tendiera a dirigir la sociedad. El planteo lo podemos abarcar dentro de lo que es el clasismo, porque apunta a lo que es el consejismo, a una revolución de consejos obreros, emparentada de algún modo con la vieja estrategia del anarcosindicalismo. Esa era la estrategia general, en el marco de esa estrategia general se apuntaba a lo que en la época se denominaba "la guerra popular y prolongada". Una guerra de resistencia que se daba en todos los ámbitos, no sólo en el ámbito político, sino también en el ámbito gremial, en el ámbito estudiantil, en el ámbito cultural, en el cual era posible la transformación social en tanto y en cuanto el movimiento popular y la clase obrera en particular, fuera constituyéndose como clase hegemónica. Se pensaba en el movimiento obrero como vanguardia de la revolución, sobre todo a partir de su posibilidad de articular un discurso hacia el conjunto de los sectores explotados de la sociedad, y conducirlos hacia una transformación social.
Para principios de marzo del 76, creo que fue el 9 de marzo de 1976, nos pegan un golpe muy grande en Córdoba, donde desaparecen un buen número de compañeros. La organización se recompone sobre la base de trasladar infraestructura y compañeros hacia Buenos Aires y hacia La Plata. Hacia fines del '77... -yo estoy reconstruyendo la historia, y parece que estoy haciendo la historia de la represión y no de la organización. La organización tiene en la coyuntura una táctica de resistencia, puramente de resistencia, pero así y todo mantiene su inserción social e incluso crece como organización dentro de determinados sindicatos. Es el caso del sindicato del caucho, que es controlado a principios del año 76, el gremio textil, en el cual se comienza a desarrollar una labor muy fuerte, apoyada en una serie de agrupaciones de base en fábricas de Capital Federal, Buenos Aires y La Plata, en el año 76 y 77. El gremio gráfico en capital federal. En 1977, a fines del 77, es ocupada la planta de Alpargatas en Varela. La fábrica permanece ocupada con los tanques rodeando la planta durante tres días. El conflicto se gana, pero inmediatamente después del conflicto, desaparecen tres delegados, incluso nos vemos obligados a trasladar compañeros de La Plata a Buenos Aires. A mediados del 77 comienzan en La Plata los operativos rastrillos, que consistían básicamente en el cierre de una zona compuesta por 4, 5 o 6 manzanas, que el ejercito revisaba casa por casa. Esto es algo que la represión pudo hacer en La Plata, pero que afortunadamente nunca logró hacer en Buenos Aires, por que allí era mucho más difícil de controlar. Por eso nos vimos obligados, al igual que otras organizaciones políticas, a trasladar a una enorme cantidad de compañeros, y toda la infraestructura, a Buenos Aires. A mediados del 78, cuando se está desarrollando el Mundial de fútbol, nos dan lo que podríamos denominar el golpe final. La RL no se recupera de la desaparición, en ese momento, de más del 80 % de los militantes más activos de la organización, de los cuales cerca de un 20 % permanecen desaparecidos. A lo largo de los meses de julio, agosto y septiembre, tras simulacros de fusilamiento, van apareciendo distintos compañeros, algunos de los cuales pasan a la clandestinidad (aunque decir que pasan a la clandestinidad implicaría un proceso de militancia, alguien que pasa a la clandestinidad es porque está en actividad. Acá los compañeros que reaparecen pasan a esconderse, a desaparecer voluntariamente, a ocultarse o a irse del país.
Esta es la realidad del año '78, no hubo posibilidades de una discusión interna que saldara cualquier tipo de errores políticos, los errores políticos que pueden haber llevado a la derrota o a la caída. En conclusión, este debate, esta autocrítica o esta critica, esta discusión, no se pudo desarrollar jamás, y esta es la realidad.

 

Resistencia Libertaria: La oposición anarquista a la última dictadura argentina

“RL fue fundada por compañeros de la ciudad de La Plata a fines de la década de 1960. El núcleo fundador constituyó una comunidad alrededor de una cooperativa de carpintería (que sigue existiendo hoy) y desarrolló proyectos militantes entre los estudiantes universitarios y luego en el movimiento obrero (en particular los obreros de astilleros y del sindicato de trabajadores judiciales).”
“Más tarde, en 1973, una conferencia anarquista se celebró en Cordoba, en la que militantes de grupos de Córdoba, Buenos Aires, Mendoza, Salta, y Montevideo participaron. Yo mismo y otros compañeros asistimos a esta conferencia como delegados de un grupo llamado Acción Directa. Había allí compañeros de La Plata, Córdoba, y Acción Directa de Buenos Aires. Constituimos Resistencia Anticapitalista Libertaria como organización nacional.”
“Me parece que la mayoría de los militantes de RL y los del nuevo anarquismo que emergió en los '70 -había una cantidad enorme de pequeños grupos de jóvenes anarquistas- tenía más orígenes pequeños burgueses que de clase obrera.
Pese a que su origen puede haber sido pequeño burgués, muchos se fueron integrando en el movimiento de los trabajadores, al que dedicaron toda su vida política y social. Ello refleja los conceptos de la época, no sólo dentro del anarquismo sino también de la izquierda en general, que afirmaban que el movimiento estudiantil tenía que proletarizarse.”
“Trabajé en el Frente gremial u obrero específicamente. En 1974 empecé a trabajar en el sindicato de fontaneros, que tenía una tradición anarquista y también viejos miembros anarquistas. Allí desarrollamos varios proyectos. Más tarde, en 1975, empecé a trabajar en una fábrica textil muy grande, Alpargatas, cuando RL empezó a dar prioridad al trabajo político en las grandes fábricas y los sindicatos industriales más fuertes.”
“Nuestra participación se centraba en los trabajadores de base, en la formación de grupos clasistas. Participamos en el movimiento laboral nacional, organizando sindicatos, comisiones internas de obreros y de revolucionarios en distintas fábricas en todo el país y las Coordinadoras de Sindicatos en Lucha[2]. Hicimos un gran número de cosas allí entre 1974 y 1976. Y en 1976, en plena represión militar, mantuvimos ocupada la fábrica de Alpargatas en Florencio Varela dos semanas, durante las cuales estábamos rodeados por el ejército.”
“No era una ocupación en el sentido de construir un consejo obrero o algo similar, que dirigiera la fábrica. Al principio, la ocupación significaba cerrar la fábrica y obligar a la patronal a negociar con los trabajadores sobre las condiciones laborales, los sueldos, etc. El conflicto concernía una serie de problemas de reivindicaciones de carácter económico.
Los cuadros de RL en esas fábricas apuntaban a la organización de los grupos de base: la educación de los compañeros, la incorporación de militantes de esos grupos en RL, la coordinación de las actividades con grupos de otras plantas, y el intento de construir relaciones entre sindicatos.”
“...Como partido de cuadros, RL casi nunca produjo propaganda partidaria o ideológica. La propaganda política era propaganda sindical o de clase, refería a las organizaciones que intentábamos crear en los frentes de trabajo.
Lo que sucedió es que determinados miembros de grupos de base que controlaba la RL se estaban formando políticamente y, con el tiempo, se incorporaron a RL como cuadros. Allí empezaron a tener acceso a textos específicamente anarquistas.”
“Tendíamos a la autoorganización de los trabajadores, de modo de impulsar estructuras autónomas del movimiento de trabajadores y menos a orientar las actividades de los frentes gremiales para un partido. Dicho de otro modo, tratamos de organizar grupos de vanguardia en los frentes de masas, no grupos de nuestra organización. Por supuesto nuestros militantes estaban en estos grupos, pero no con un carácter partidario.
La organización tenía esta concepción bakuninista de militantes revolucionarios que había fraguado la Alianza de la Democracia Social de Bakunin. O sea, eran militantes que actuaban y coordinaban de modo de organizar las masas populares, pero ellos no tenían un plan de dirigir las masas populares. Para decirlo de otro modo, nuestro trabajo es la construcción del poder, no la toma del poder.”
“En general, las discusiones giraban alrededor de trabajos de inserción concreta, de estrategia de alianzas, o sea, con quienes podíamos aliarnos y con qué carácter.
Por ejemplo, había una discusión interna sobre la alianza con la Organización Comunista Poder Obrero. O igualmente, en 1976, durante la dictadura militar, los Montoneros (11) lanzaron la CGT(12) en la Resistencia (CGT-R). O sea, buscaron vincular el sindicalismo a una CGT no oficial, paralela, y eso produjo una discusión en nuestra organización sobre si era coherente, si lo correcto no era consolidar la federación laboral que existía y que los trabajadores reconocían como suya. O sea, los trabajadores seguían viendo a la CGT como su organización, por eso construir una organización paralela podía resultar inútil o incluso peligroso. Esta discusión continuó hasta 1978.”
“(Entre 1976 y 1978)... Trabajamos fundamentalmente para conservar los grupos que teníamos en el frente gremial, así como en los frentes barriales y estudiantiles”
El frente barrial atendía, sobre todo, a los vecinos más pobres. Las actividades de los grupos barriales tenían que ver con reivindicaciones de agua, alcantarillado, construcción de casas, parques para juegos, etc., (reivindicaciones muy variadas de vecinos pobres).”
“En el frente estudiantil trabajamos sobre las demandas tradicionales de los estudiantes: programas de estudio, material de aulas, y diplomas : los conflictos habituales del medio.”
“En una situación de total clandestinidad una organización está obligada a tener un muy fuerte nivel de financiación como para sobrevivir y seguir actuando y protegiendo a sus militantes. Muchas tareas no pueden autofinanciarse, por eso hay que tener un aparato permanentemente dedicado a generar tales recursos. Entonces, el aparato comienza a tener una preponderancia, un mayor nivel de significación de lo que se suponía iba a tener al principio. Para nosotros, el frente militar no era lo mismo que para los otros partidos de izquierda en Argentina, "el embrión de un ejército" o algo por el estilo. En nuestra estrategia de guerra popular prolongada, preveíamos la creación de un ejército popular, pero entendíamos que dicho ejército se haría en las fábricas y los barrios, que desde luego apoyaríamos, pero no sería un organismo de un partido. Teníamos un concepto diferente al respecto [que los otros grupos izquierdistas.”

Estructura organizativa de Resistencia Libertaria
“RL era una organización absolutamente clandestina y estaba organizada de forma celular en frentes de trabajo. Estos frentes eran el frente gremial, el frente estudiantil, y el frente barrial. RL tenía también un aparato militar que era, en realidad, un mecanismo para financiar el trabajo de la organización -actuar en un momento de casi absoluta clandestinidad es muy oneroso- y para la protección de militantes, etc., dado que cosas como los secuestros y acciones de las derechas en contra de los grupos de trabajadores de la extrema izquierda eran comunes en esa época. Era necesario organizar la autodefensa en algunos casos.
La democracia de la organización, obviamente, no funcionaba a través de las asambleas, sino que se llevaron a cabo votaciones y elecciones dentro de una organización de tipo celular. Cada célula tenía un delegado y éste se conectaba con los niveles superiores de la organización, sucesivamente, hasta llegar a una relación de carácter nacional o regional. Así, las decisiones alcanzaban el nivel nacional del mismo modo que llegaban a la célula. O sea, las decisiones subían y bajaban de la misma manera [dentro de la organización]. Pero, desde luego esto era más complejo, porque no era posible reunir a cada uno para hablar.”
“RL fue concebido como un partido de cuadros, no un partido de masas, y entonces la gente que tenía relaciones con RL podía tener un nivel más bajo de formación política y de entrega que un cuadro de RL, y participar en grupos que RL controlaba en cierto modo, como los grupos de base en los barrios, las fábricas y las universidades. Por eso, cuando uno piensa en esta cuestión, hay que imaginar un volumen de influencia muy superior al grupo de cuadros que mencionaba.”
“Un cuadro es un militante que, por su formación [política] es capaz de conducir estrategias autónomamente cuando está inserto en determinado lugar de trabajo, sin mantener una relación orgánica, permanente con la organización (lo que no es posible a causa de la represión). O sea, a pesar de estar aislados de la organización, debido a la situación de clandestinidad, esto/as compañero/as eran capaces de generar estrategias en el marco y dentro de las necesidades de la organización. Él o ella era capaz de construir un frente de trabajo en cualquier circunstancia. Un cuadro es un cuadro político-militar. Dicho de otro modo, un cuadro es un militante capaz de desarrollar un trabajo político de captación u organización en un barrio o una fábrica, que sabe cómo preparar un coctel Molotov o una bomba de cualquier tipo, que sabe cómo valerse de un arma, etc.
Y esta es la diferencia con un partido de masas: un partido de cuadros sólo incorpora militantes que han aceptado totalmente la organización antes de ingresar en la misma. En un partido de masas el autoritarismo aparece como natural, porque hay distintos niveles de compromiso dentro de la organización, desde los militantes inferiores hasta los líderes. En RL, el nivel de los militantes era equiparable y cualquier militante podía ejercer cualquier función en cualquier momento. Entonces, para que sea posible este desarrollo, el militante que se va a incorporar a la organización tiene que tener un nivel de formación como los demás que ya están en la organización. Creo que el modelo se tomó en cierto modo de la Alianza de la Democracia Social de Bakunin, el partido que él construyó durante la I Internacional.”
“...los militantes de todos los frentes participaban a veces en operaciones que no eran específicas de su frente: en operaciones de propaganda armada; en actos relámpago en que se interrumpía el tránsito con barricadas, automóviles volcados; acciones con volantes; pequeños explosivos, y miguelitos, etc. Los cuadros y los militantes de distintos frentes participaban algunas veces en esas operaciones.”
“(Sobre el frente militar)...Por supuesto era el núcleo más pequeño de la organización. No estaba necesariamente constituido por los compañeros mayores, más probados de la organización –no había regla en este aspecto- pero naturalmente los compañeros más fogueados y de más edad acababan por estar en este frente porque entre estos compañeros se encontraban los más conocidos, lo que habían sido más expuestos públicamente y podían ser detenidos. En otras palabras, sus nombres habían caído en manos de la represión y entonces no podían actuar en los proyectos de más visibilidad.”
“Por ejemplo, los compañeros que venían de los astilleros habían sido denunciados y perseguidos porque eran militantes conocidos en los sindicatos. Cuando la represión se agudizó en 1976, fue necesario trasladar a estos compañeros de Berisso y Ensenada e insertarlos en tareas menos visibles, con mayor cobertura, en las zonas del Norte de Buenos Aires, en San Fernando, en Tigre, etc.”
“...ante todo (estos compañeros) trabajaron en el frente militar y, a veces, llevaron a cabo acciones con otras organizaciones, para conseguir dinero u otras cosas que eran necesarias, como armas, maquinaria de imprenta, y autos.”
Como es típico de este tipo de grupos en el mundo entero, tenía que ver con secuestros para sacar rescates de empresarios. Algunas veces hubo acciones para asustar a la policía, cuando un vehículo de la policía fue quemado o una comisaría fue baleada. O sea, acciones de diferentes tipos.”
“Nos llevábamos particularmente bien con grupos de carácter clasista. Estaba la Organización Comunista Poder Obrero, que era una organización de la nueva izquierda y un grupo clasista. Si bien eran leninistas, hasta leninistas clásicos, teníamos un nivel importante de acuerdos con ellos.”
“Los acuerdos eran funcionales: la coordinación de esfuerzos en el movimiento laboral, la organización de Coordinadoras (fundamentalmente en el frente gremial). Algunas veces las relaciones se establecían también a nivel de la defensa militar, en operaciones que hicimos con ellos. Tenían un aparato militar llamado las Brigadas Rojas, que era mucho más desarrollado que el nuestro.”
“Los debates dentro de la RL tuvieron lugar a través de minutas, que eran resúmenes escritos de una discusión. Se pasaban a una célula, a una esfera de coordinación, de esta esfera de coordinación a otra esfera de coordinación. Es así como las minutas circulaban (y lo que permitía que tuvieran lugar las discusiones en un marco de total clandestinidad).”
“Cada lugar de trabajo tenía su publicación cuando teníamos un desarrollo importante y donde existía la posibilidad de prensa interna, pero las publicaciones eran de los frentes de trabajo, no de la organización. Eso tenía que ver con el carácter de RL como partido de cuadros, no un partido de masas.”



[1] Introducción de Chuck Morse a la entrevista

[2] Coordinadoras de Sindicatos en Lucha era una organización formada cuando la actividad laboral pública se hizo imposible por la represión. Estaba integrada por militantes obreros independientes y de organizaciones revolucionarias de izquierda, incluida la RL. Coordinaba las actividades de militantes en las fábricas y otras áreas.